LAS NOTAS DE HOY
En fin. Vean esta nota del Universal y chequen el CINISMO de Abascal. También noten que se refiere al gobierno ESPURIO como "la autoridad formal" y no como "la autoridad legítima" o "la autoridad legal":
"Estuve en reuniones de Fox y Moreira y nunca sucedió nada": Abascal
Rechaza que el ex presidente solicitara al gobernador de Coahuila meter a la cárcel a inocentes por el caso Pasta de Conchos
TEXTO JOSÉ LUIS RUIZ . FOTO PEDRO MERA
El Universal
Viernes
En medio de la polémica por la tragedia de Pasta de Conchos, Carlos Abascal prefiere no inmiscuirse más en el tema, y minimiza a lo anecdótico las acusaciones vertidas por el gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, quien apenas el lunes achacó al ex presidente Vicente Fox la petición de meter a la cárcel a inocentes para resolver esta crisis.
"Quien conoce bien al ex Presidente (Vicente Fox Quesada) sabe que no es capaz de una petición así", dice reflexivo el ex secretario de Gobernación, momentos antes de iniciar de manera formal una entrevista con EL UNIVERSAL.
Él mismo estuvo en ese encuentro en el que, según Humberto Moreira, Fox hizo la insólita petición.
"Yo estuve en todas las reuniones que sostuvo el (ex) Presidente con el gobernador de Coahuila. y eso nunca sucedió", recuerda Abascal, apenas se preparaba para la entrevista.
Sereno, ya casi listo para partir a la Iglesia para cumplir con la liturgia del Miércoles de Ceniza, inicio de la Cuaresma, Carlos Abascal sostiene que la mejor manera que tiene el ex secretario de Gobernación de aportar a los intereses del país es respetando y dando su lugar a las nuevas autoridades tanto en el Poder Ejecutivo como en el Legislativo.
En la conversación deja en claro su rechazo a los protagonismos y admite que lo mejor es no estar "metiendo ruido" en el ambiente político.
"Si cualquiera de nosotros (los ex secretarios) piensa que tiene las soluciones, el hilo mágico, que tiene la piedra filosofal. que se la sabe de todas, todas, y pretende jugar un papel personalista, está totalmente equivocado", arremete el ahora secretario general adjunto del PAN.
A ambos lados de su escritorio lo acompañan dos figuras religiosas: una imagen de la virgen de Guadalupe, ya reconfortada con un ramo de rosas blancas, y un cristo de madera del siglo XVIII, calcula, que le obsequió un amigo, don Felipe Coria Maldonado, y que desde hace 30 años resguarda sus espacios íntimos de trabajo.
"Creo que el anterior secretario de Gobernación tiene que darle todo el respaldo a quienes hoy tienen la autoridad formal para conducir los asuntos públicos de este país, y esa es una ayuda enorme, en lugar de estar ahí, cuestionándolos, metiéndoles ruido o descalificando", subraya Abascal.
Habla off the record de lo que enfrentó como secretario de Gobernación, de las duras y largas pláticas que sostuvo con Flavio Sosa, dirigente de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) y de otros episodios que vivió durante su gestión en Bucareli, y ya en la formalidad de la entrevista sostiene que "nuestro cauce para aportar son las instituciones".
Desde su oficina en el tercer piso del edificio sede del Partido Acción Nacional observa el tráfico que por la tarde es habitual sobre la avenida José María Rico. No pierde el hilo de la conversación.
"Creo que el país tiene instituciones y entonces, los ex secretarios, el de Gobernación, entre ellos, tenemos el reto de participar con nuestra visión, con nuestras opiniones y con nuestra experiencia, pero a través de las instituciones que existen", argumenta.
Insiste en que cualquiera que piense que tiene el "hilo mágico" para solucionar todo incurre en el error, en otras palabras, que está equivocado.
"En este caso, la institución a través de la cual yo puedo aportar algo a este proceso es el Partido Acción Nacional como secretario general adjunto", agrega.
Aduce que otra forma importante de ayudar al país es favoreciendo que una mayor cantidad de gente "preparada o enamorada" de México haga sus aportaciones sin el prejuicio de que "sólo yo sé".
"Por eso se tienen que adoptar estas tres conductas: respeto incondicional a las instituciones y a las personas que hoy están a cargo; segundo, participar desde las instituciones y tercero, escuchando a la mayor cantidad de la gente preparada con algo que aportar en la materia", delinea Abascal.
De esta manera, asevera, el "granito de arena" que cada uno aporte, se sumará a la de muchos más, lo que permitirá alcanzar metas que tengan como fin el bien común.
"Yo no creo en los cambios de día a noche, de blanco a negro, de todo o nada; creo en los cambios graduales, porque para transformar al país no basta con cambiar sus leyes e instituciones, hay que cambiar la mentalidad, y con frecuencia la cultura de las personas". Y como piso firme coloca al diálogo.
Y con este ánimo, continúa, se podrán alcanzar acuerdos y consensos para lograr las reformas estructurales que requiere el país para su desarrollo, incluyendo una reforma del Estado "no radical ni definitiva", pero que sí represente un paso en la dirección correcta.
"Tenemos que crear nuevas fórmulas de construcción de mayorías para sacar las reformas que el país requiere en muy diferentes ámbitos, en seguridad y justicia, en empleo y competitividad, en materia energética y hacendaria, porque el país no puede permitirse el lujo de mantenerse inmóvil estructuralmente por otros seis años en temas que necesitan de una construcción de consensos y acuerdos que permitan adecuar leyes e instituciones", explica.
Para Carlos Abascal hoy se tiene el reto de definir una Presidencia fuerte con atribuciones "bien precisas" en la Constitución, con posibilidades de construir mayorías que permitan la gobernabilidad, que no es más que la posibilidad de desahogar, desarrollar y cumplir un plan de gobierno, comenta.
¿Por QUÉ entonces le deberíamos de creer ahora?